MOISÉS POR VICENTE SEGRELLES.

Vais a decir que tengo fijación por los temas bíblicos, y es verdad, desde pequeño me han maravillado las películas de este género como, “Los diez mandamientos”, “Sansón y Dalila”, “La historia más grande jamás contada”... Me acuerdo que mi héroe bíblico predilecto era Sansón, lo dibujaba quebrando cabezas de filisteos o luchando contra fieros leones; no conservo esos dibujos, una pena. Recuerdo que, para Reyes, pedía biblias de estas, ilustradas, sobre todo me gustaban los dibujos épicos que aparecían en ellas, tan pictóricos, como de aventura histórica.

Todo esto lo ha traído a mi memoria el comentario que mi buen profesor, Mariano Ibeas, ha dejado en esta entrada. Lo copio aquí para seguir el hilo:

“Yo creo que conocí a este Segrelles en los años 70 (la prehistoria). Yo trabajaba en la Librería París y tuve una charla interesante sobre sus métodos y sus trucos para las portadas. Recuerdo cómo explicaba por ejemplo, la de una portada de una Biblia para niños inspirada en el Moisés de la peli “Los diez mandamientos” y en la figura de Charlton Heston, creo... lo que hizo es poner a un “modelo” con una “manta zamorana” o algo así sobre los hombros y luego sobre el dibujo o el boceto colorear el conjunto. Recuerdo que me dijo que tenía un espejo inclinado en la pared, sobre su tablero de dibujo y a veces dibujaba mirando al espejo...”

Vicente Segrelles estuvo viviendo un tiempo en Zaragoza, su mujer es de aquí. Era en los años que trabajaba para la editorial Afha y realizaba libros sobre maquinas, armas y tecnologías varias. También hacia dibujos técnicos para catálogos y tenia un ayudante para estos temas llamado Sergio Abraín, hoy afamado pintor.

Vuelvo al tema de La Biblia. Cuando ví en una librería la ilustración que comenta Mariano, me entró por los ojos de manera tal, que obligué a mi madre a comprar el dichoso libro, inducido únicamente, por el dibujo de la portada. Incluso me atreví a hacer una copia a gouache y acuarela que si conservo, la de la derecha.

El libro en cuestión fue editado en 1972 por Ediciones Afha dentro de la colección Selecciones Auriga; aparte de la portada de Vicente Segrelles, Antonio Cunillera se encargó de adaptar el texto y Sanromá realizó las ilustraciones interiores.